miércoles, 29 de agosto de 2012

Feng Shui : ¿De qué se trata?

El Feng-Shui es un arte milenario que intenta utilizar los elementos a nuestro alcance para hacernos mas favorables las energías del planeta.

El vocablo Feng significa viento y Shui agua. La frase viento y agua simboliza "el viento ascendiendo a la cima de una montaña, y el agua subiendo hacia su cumbre". Esta filosofía oriental, se puede aplicar en decoración de interiores y exteriores, arquitectura y jardinería. Los que se atrevan a estudiar el Feng-Shui descubrirán un mundo fascinate y muy amplio que podrá llevar a la practicar, comprobando sus resultados, de una forma muy amena y divertida.

Occidente poco a poco se va rindiendo al Feng-Shui, siendo muchos los arquitectos que diseñan y elaboran sus planos con la ayuda de maestros y asesores de esta técnica. Multinacionales de gran prestigio internacional (sobre todo norteamericanas) están elaborando sus edificios respetando estas tradiciones orientales, y poco a poco se dejan ver muchos elementos de decoración vinculados con el Feng-Shui.


LA HISTORIA

Hay dos maneras de estudiar y practicar el arte Feng-Shui: la Escuela de las Formas basada en la orientación de la puerta principal del hogar, y la Escuela de la Brújula desarrollada a partir de los puntos cardinales, independientemente de donde este situada la entrada.
Ambas se extendieron por separado y solo se logró enlazar ambas enseñanzas a finales del Siglo XIX. El motivo de esta dos practicas viene de antaño. Los habitantes de china se establecieron en el sur y el norte del continente, con unas condiciones de vida completamente distintas. La zona norte era un territorio plano, pobre y sacudido por los vientos, mientras que la parte sur, tenía colinas florecientes y ríos ondulantes. En el Siglo IX vivió allí el gran maestro YanYung-sun quien se encargó de recopilar y concretar la Escuela de las Tres Puertas, como era conocida también la Escuela de las Formas, y la denominó Hsing Shih que significa forma y orden.

Dicha escuela se ocupaba de las características visibles de un paisaje en el entorno de la vivienda. Aproximadamente un siglo después, el maestro Wang Chih dio una nueva perspectiva al Feng-Shui al desarrollar el método de la brújula. Procedía del norte y por ello esta tendencia se conoce también como Escuela de Fu-Kien. Este estudioso pensaba que la otra escuela era poco rigurosa. Naturalmente el sistema de Wang Chih era más ajustado para el paisaje poco cambiante de su origen, mientras que en el sur todo eran frecuentes cambios propiciados por la naturaleza.

Sin embargo durante muchos siglos los maestros de las diferentes disciplinas no se ponían de acuerdo y cada uno defendía sus propias consignas. Hace apenas unos cien años los maestros comenzaron a unificar posturas. En la actualidad, los consultores y maestros de Feng-Shui utilizan, evidentemente los dos medios para llevar a cabo sus análisis, cosa impensable hace siglos.
No pretendo extenderme mas en esta cuestión, tan solo aclarar un tema de frecuente confusión para los recién llegados al Feng-Shui. El verdadero proposito del presente trabajo es ofrecer varios consejos muy útiles, que son muy sencillos de aplicar para que el lector comience a utilizar este noble arte, y experimente en su propio hogar.


EL MÉTODO

 Estas son las herramientas básicas para comenzar a conocer los entresijos del FENG-SHUI, y que le ayudaran a compensar las zonas erróneas de su hogar, y potenciar por ejemplo la fortuna, la salud, la familia o los benefactores, según los coloque en los lugares apropiados.
Objetos brillante (espejos, bolas de cristal Feng-Shui y luces artificiales)
Los colores (cada habitación de la casa se potencia con un color según el Ba-Gua)
Los sonidos (sonerías, campanas y música)
Fuerza Vital (plantas, peceras, estanques, etc)

Energía Cinética (fuentes de agua, ventiladores de aire, etc)
Objeto de peso (esculturas, columnas, etc)
Energía eléctrica (ubicación de equipos electrónicos)
Los símbolos (flauta de bambú, Ba-Gua, etc)
Otras herramientas (banderas, cortinas, incienso, cuadros, etc)
Con estos objetos se suavizaran las malas energías que se puedan concentrar en algunos puntos de su hogar o negocio, debido a una inadecuada construcción del edificio o al mal emplazamiento de los enseres
  
 LOS CONSEJOS

1.- Elige una casa de forma cuadrada que tenga protegida la parte posterior y los laterales, dejando vía libre la zona de la entrada. La protección puede estar refrendada por arboles, colinas u otros edificios. Un elemento esencial en la entrada puede ser la instalación en su lado izquierdo de una fuente o estanque de agua que favorecerá la fortuna.
Evite colocar una piscina justo detrás de su casa, el lugar adecuado para su ubicación es en la parte delantera. Y siempre con formas redondeadas y suaves.
2.- Evita los objetos agudos y afilados como plantas de hojas afiladas, esquinas, mesas cuadradas, vigas, columnas, etc. Hay que tener en cuenta que un fundamento esencial del Feng-Shui es utilizar la energía del Chí, fuerza universal que nos rodea, y que podemos canalizar y utilizar. Por tanto todos los objetos redondeados y en espiral le serán propicios y evitara que la energía se estanque. Por el contario las lineas rectas, que no son nada aconsejables en Feng-Shui, como por ejemplo un pasillo o una columna cuadrada propagan muy mal el Chí. Si tiene una mesa cuadrada o rectangular con puntas, coloque sobre ellas objetos redondos que suavicen las formas.
3.- La parte delantera de la casa es Yang (movimiento) por lo que se recomienda que se instale junto a la puerta los lugares de ocio y el comedor, dejando para la parte posterior, Ying (quietud) los dormitorios y la biblioteca. Nunca situé en la entrada grandes objetos que dificulten el acceso de la energía. Los expertos señalan que situar plantas de cactus en la entrada es muy nocivo por su forma puntiaguda.
4.- La limpieza y el orden deben ser imprescindible , pues permite que la energía fluya con libertad. Ordene los trasteros y evite acumular objetos inservibles. Los aromas naturales y los inciensos aumentan el flujo del Chí y mucho mejor si es acompañado con música de relajación.
5.- Los animales domésticos son muy aconsejables, atrayendo el Yang moviendose regularmente por toda la casa. Los maestros de Feng-Shui aconseja la posesión de tortugas que es un animal de protección del hogar. Los gatos suelen eligir zonas de radiaciones para sentarse o descansar, por tanto nunca te acomodes en dichos lugares.
6.- Precaución con los espejos. Nunca ponerlos alineados con puertas y ventanas (excepto si tienes delante de tu vista un bello paisaje y pretendes atraer para tu hogar el Chí de la naturaleza). Sobre todo evitarlos frente a la puerta principal y en los dormitorios. En la entrada te repelerá la energía, que no entrara en tu casa y en los dormitorios al entrar dentro de los objetos considerados Yang, te perjudicaran el descanso. Al menos intenta que no refleje la cama y que no sean excesivos. Si no se puede evitar, cubrelos durante la noche.
7.- Los colores deben ser utilizados correctamente en cada habitación de la casa o negocio, según le corresponda dentro del esquema del Ba-Gua
8.- Las puertas y ventanas no deben estar alineadas, si no pueden cambiarse separarlas visualmente, bien con un biombo o con cortinas.
9.- Colocar objetos que tengan que ver con el agua (elemento muy importante) en la parte norte de la casa (excepto si hay un inodoro), como por ejemplo un acuario o una fuente. Ayudara a potenciar la zona de la fortuna atrayendo el dinero.
10.- Si tienes escaleras dentro de la casa no colocar jamas debajo de ella un escritorio o un acuario, ni nada que exprese movimiento, instala mas bien elementos relacionados con la familia.
11.- Tanto las columnas cuadradas como las vigas expuestas son consideradas mal Feng-Shui, creando un Chí negativo debido a sus esquinas y formas rectas, actuando como flechas envenenadas hacia el lugar donde apunten. Un remedio para las vigas expuestas es crear un falso techo, si no es posible colocar dos flautas de bambú con cordones rojos apuntando sus boquillas hacia arriba. Para las columnas cuadradas se pueden colocar plantas que giren alrededor de la columna, objetos redondos, sonería o espejos (estos anulan visualmente la columna).
12 .- El cuarto de baño debe emplazarse en la zona norte, nordeste o noroeste del hogar ya que esta vinculado al elemento agua. Es la zona mas conflictiva de la casa, se aconseja tener siempre el inodoro cerrado, sobre todo cuando se utilice la cisterna. Mantenerlo perfumado y ordenado. Situado en el centro de la vivienda provoca posibles enfermedades. El remedio puede ser colocar un cristal semicircular en la puerta.
13.- Los hornillos de la cocina siempre han de estar limpios y pulcros, pues representan la prosperidad. Nunca deben estar junto a la pila de fregado. Si no se puede cambiar colocar un objeto de madera entre ambos, como por ejemplo una cuchara de madera colgada de la pared. Evitar un inodoro alineado con los hornillos al otro lado de la pared. El mejor emplazamiento de la cocina es el lado oeste de la vivienda, procurando que no coincida con la puerta principal. Evitaríamos problemas de obesidad y psicológicos.
14.- En los dormitorios buscamos tranquilidad por ello no son aconsejables como vimos anteriormente los elementos Yang, como por ejemplo el agua, elude todo lo relacionada con ésta. Elige colores relajantes como el azul, los tono beige y claros. Eludir sobre todo la existencia de una viga descubierta sobre la cama y mucho más si es de forma vertical, pues representa la separación de la pareja. El colchón de matrimonio debe ser de una sola pieza y se debe evitar los metales en la cama o en la cabecera.
15.- En la sala de estar, elige colores como el verde, el amarillo o el rojo (aclarar que cuando hablamos de colores no solo me refiero al tono de las paredes si no al color general de los objetor reinantes en el lugar). Coloca el sofá de modo que os veáis frente a frente, la rinconera son propicias por su forma circular. Sitúa un gran espejo frente a donde vayáis a comer de modo que se refleje toda la familia. La mesa de la sala o comedor, debe de tener las esquinas redondeadas, si no es así compensalo con objetos y floreros circulares o con curvas.

Actividad Gratuita sobre Feng Shui


miércoles, 15 de agosto de 2012

Hambre,Amor y Flores de Bach por Carmen Almansa

Las necesidades básicas del Ser Humano son sólo dos: El Hambre y el Amor

En este trabajo se describen algunas de las esencias florales del sistema Bach que pueden servirnos de ayuda cuando no tenemos una relación “sana” con la comida. Cabe señalar como advertencia importante que problemas severos como anorexia, bulimia y obesidad grave, entre otros, requieren un tratamiento especializado, aunque la terapia floral pueda colateralmente servir de ayuda.
Centrando la temática de este artículo, ¿a qué tipo de problemas con la alimentación está dirigido este trabajo?. Como es conocido las esencias florales de Bach tratan principalmente los “padeceres” emocionales de la persona frente a un asunto, no el asunto en sí (el “cómo lo vive” y no el “qué”). Esto es, si la persona tiene “unos kilos de más” y lo vive estupendamente, no se requiere de ninguna esencia floral; en todo caso puede ser un síntoma de salud emocional en un mundo tan influido por la imagen. Tampoco es una cuestión objetiva, ya que por ejemplo una bella mujer con un cuerpo espléndido puede tener una relación de “dolor” con la alimentación y con su imagen.

La forma en que nos relacionamos con la comida está muy conectada con nuestro mundo emocional. Aunque existen otros factores importantes (genéticos, educacionales, culturales, entre otros), una relación inadecuada con la comida –en mi opinión- ha de enfocarse como un síntoma o consecuencia de conflictos emocionales de la persona. Es por ello que las dietas fracasan una y otra vez (a menudo empeorando el problema) o, como mucho, producen mejoras temporales, porque están dirigidas al síntoma y no a la causa.
Como señala Menéndez (2006) la alimentación va asociada a toda nuestra historia emocional. Nuestro cuerpo es un organismo que se pone en marcha gracias al alimento físico, la comida, y al alimento emocional, el amor, el afecto. Si éste último falla, la mente busca canales para expresar su malestar. La compulsión ante la comida, la inapetencia, la necesidad de perder peso, la incapacidad para ganarlo o cualquier desorden alimentario son algunos de los canales que nuestra psique utiliza para avisarnos de que algo no marcha como debiera. La alimentación, por tanto, no sólo nos sirve como fuente de energía; también puede tener la capacidad de acallar conflictos psicológicos que no podemos expresar.
Durante el primer año de vida, los niños aprenden a conocer el mundo utilizando su boca. La primera relación de afecto es la que se desarrolla entre el bebé y quienes le alimentan. Así pues, se genera una relación básica que perdurará durante toda nuestra vida: el afecto y la nutrición.
Cuando el niño no recibe una adecuada atención, ya sea por exceso (ofreciendo comida ante cualquier malestar), o por defecto (negligencia), probablemente crecerá en la perplejidad y la confusión, sintiéndose incapaz de distinguir cuándo tiene hambre de cuando está satisfecho y, en el futuro, tendrá dificultad para diferenciar entre la necesidad de alimento y otras necesidades o emociones. También en el ámbito familiar se crean diferentes patrones de interacción en los que se utiliza la comida con fines distintos a la nutrición, puede ser usada como arma ofensiva o defensiva, como castigo o recompensa.
A partir del momento en que un padre da a su hijo una galleta o un caramelo para consolarlo y que se tranquilice, la comida se transforma en algo emotivo y no sólo físico. Desde la infancia, la comida se utiliza para celebrar algo, calmarse, aliviar el aburrimiento o la depresión y consolarse en momentos de tristeza o angustia. Aceptar un trozo de tarta de cumpleaños porque rechazarlo sería antisocial, premiarse con un poco de chocolate al concluir una ardua tarea, o beber sin ganas una cerveza o una copa de vino cuando hacemos vida social son prácticas de la vida cotidiana.
No es frecuente que de niños se nos ayude a identificar las emociones. Es habitual en nuestra sociedad experimentar dificultad para identificar lo que está sintiendo y expresarlo. En un mundo de tanto conocimiento y cultura, la mayor parte de nosotros somos grandes “analfabetos emocionales”. Las personas que sufren trastorno del comportamiento alimentario tienen una gran confusión sobre sus estados emocionales internos, incluidas las sensaciones de hambre o saciedad. Quienes recurren a la comida o la rechazan como forma de compensar sus emociones probablemente hayan aprendido desde niños a minimizar, negar o no mostrar ante otras personas lo que están sintiendo.
Es por ello que, cuando una cliente en el espacio de la consulta floral solicita ayuda para su “incómoda o dolorosa” relación con la comida, entiendo que es apropiado indicarle “que este es un tema que irá mejorando a lo largo de su proceso”, evitando tratarlo como un objetivo en sí mismo, ya que es un síntoma de asuntos habitualmente profundos y arraigados, que habrá que ir descubriendo. Citando de nuevo a Menéndez (2006):
“Es inútil, perder tiempo y energías controlando obsesivamente la dieta cuando el peso del conflicto se desarrolla en el mundo de los afectos. (...) La boca que se cierra y se abre a la comida es la misma boca que quiere hablar.Desamor, abandono, culpa, rabia, celos, rivalidad, angustia o tristeza son algunos de los sentimientos que pueden estar intentando expresarse a través de los conflictos con la alimentación (...). Cuando nuestra boca no pronuncia lo que sentimos, traga para aliviar la tensión emocional. (...) En ocasiones, las dietas intentan controlar algo que no podemos controlar por dentro como el sentir que no somos quienes queremos ser. Por ello, sólo cuando uno comienza a quererse realmente puede afrontar una dieta saludable. De lo contrario, se puede llegar a pensar que se está intentando controlar algo que va más allá de los kilos (...). Los trastornos alimentarios aparecen cuandointentamos tapar con la comida conflictos que no podemos resolver de otra forma (...) cuando un abismo separa lo que somos de lo que nos gustaría ser


Cualquier emoción puede expresarse a través de un conflicto con la comida. Por tanto, cualquiera de las 38 esencias florales de Bach pueden servirnos de ayuda. He aquí una selección personal:

Las esencias florales relacionadas con la auto-condena, auto-castigo o auto-destrucción son, en mi opinión, muy importantes en el tema que nos ocupa. Aunque la persona, en la mayor parte de los casos, dependiendo de su grado de auto-conocimiento, no sea consciente de esta relación:
“El exceso de comida me daña, así expío mis culpas”
Pine, cuando la persona se siente culpable (consciente o no) y se castiga “poniéndose a rebosar”. Coincido con Menéndez (2006) en que cualquier emoción puede expresarse a través de un conflicto con la comida, pero el más espectacular es la culpa: "Es un sentimiento inconsciente que se calma comiendo".
“Me aborrezco, me doy asco” (por los kilos de más)
Crab Apple
, a la persona le desagrada enormemente su aspecto (hasta darse “asco”). Esta esencia nos hace retornar a un estado de proporción.
Ayuda amar el propio cuerpo, nos devuelve a un estado de dignidad.
“Sólo el orden y auto-control interno pueden salvarme” (al menos tengo control sobre lo que como)
Rock Water se pondrá muy estricto con la dieta (que será rigidísima), y claro, vivirá mucha angustia a través de estados Cherry Plum.
Estas cuatro esencias (Pine, Crab Apple, Rock Water y Cherry Plum) constituyen un núcleo que pueden actuar a modo de mapa emocional (unas llevan a otras y se retro-alimentan).

Comer o dejar de hacerlo por estar enfadado es algo que ocurre más en mujeres que en varones, ya que tradicionalmente a éstas se les ha reprimido mostrar rabia. Las personas que creen que no tienen derecho a enfadarse, o las que se asustan mucho ante sus propias reacciones de enfado, son más propensas a usar la comida inadecuadamente. Sucede que la persona se siente rabiosa pero no lo ve o lo ve pero no se lo permite (soy “niña buena” o “tengo miedo a las consecuencias de expresar mi enfado”), entonces el estado Holly (puede que sano 1) inicial se vuelve contra la persona, y se transforma en Willow. Desde ahí sólo la comida me calma “esa ansiedad que me provoca esta situación”, que tiene como base ese enfado o resentimiento. Por no hacer daño al otro me lo hago a mi, de diferentes formas, una de ellas puede ser atiborrándome de comida.
1) Miedo, tristeza y rabia son emociones básicas desagradables pero funcionales. 



Compulsión a gratificarse alimentándose como revancha ante la falta de nutrición afectiva y la insatisfacción de sentimientos de rechazo anteriores. Heather, es así una de las flores principales en la relación disfuncional con la comida. Es un estado emocional que se sustenta en un sentimiento de vacío (fijación oral: “no hubo bastante teta de mamá”), aunque la persona no sea consciente de ello, sino de una necesitad de llenar un agujero… por ejemplo, con comida.
En momentos de mayor soledad afectiva puede “arramblar” con el frigorífico. Heather relaciona “inconscientemente” la comida con la falta de compañía, atención y afecto. Por otra parte, aunque puede carecer objetivamente de este afecto también tiene dificultad de nutrirse, es así un “pozo sin fondo” o un “estómago sin fondo”.


De entre las emociones que pueden conducir a un uso inadecuado de la comida destaca la ansiedad. Generalmente la ansiedad es más intensa cuanto menos se conoce la causa que lo provoca. En general podrían incluirse aquí las esencias florales relacionadas con estados de ansiedad y angustia (Orozco, 2004), destacando por la frecuencia en el tema que nos ocupa:
Agrimony que calma su ansiedad con la comida. Puede sentir que “algo le pasa y no sabe lo que es”, está desconectado de sus emociones y actúa compulsivamente. O puede saber qué le pasa, pero trata de auto-engañarse, o minimizar el asunto, calmar su hipersensiblidad al dolor con “comida” (o “comida como analgésico emocional”).
Aspen, es un estado de mucha angustia y ansiedad que precede a “atracones” como forma de calmar esa preocupación inespecífica.

Cuando el problema del sobrepeso o la obesidad es genético y/o la persona lo vive así la esencia Walnut, como en otros síntomas físicos relacionados con la herencia, ayuda a romper el lazo, patrón o vínculo de la constelación familiar.



Si la persona vive con resignación (que no con aceptación) sus “kilos de más”, sintiendo  que no hay posibilidad de cambio porque “soy así”, la esencia Wild Rose puede ser de ayuda.


Centaury, dificultad de límites, de “limitar” la ingesta en este caso, esencia que como Patrón Transpersonal (Orozco, 1996 y 2003) ayuda a cortar con las adicciones, porque “nos somenten”, en este caso “adicción” a la comida.
Cherry Plum  ayuda en el mantenimiento de la voluntad cuando existe una presión “me lo como – no me lo como” (y “me lo comí” y me siento culpable (Pine) y despreciable (Crab Apple).


Chicory - Willow, ayudaría en la necesidad de estar siempre acumulando y en la dificultad de soltar, en este caso kilos. Recordemos que en Patrones Transpersonales (R. Orozco) Willow y Chicory son dos estados de retención. Y en el Sistema Bach (Juan Bautista, 2007) constituyen una pareja flor de personalidad-flor espiritualizada.
La pareja Agrimony – Walnut también estaría indicada para quienes necesitan de la obesidad como escudo protector. Constituyen también una pareja floral en el Sistema Bach anteriormente mencionado.


Aunque este escrito tiene un enfoque más “anti-dieta” que de “ayuda en la dieta”, mientras vamos aprendiendo a conocer y respetar nuestras emociones, algunas esencias florales que pueden ayudarnos, si decidimos cortar con hábitos alimenticios dañinos para nuestra salud física y/o emocional, a tener en cuenta pueden ser:
Heather, si sufrimos de “ansiedad oral”. Necesitamos tener algo en la boca (palabras, cigarros, comida, etc.). Sensación de insaciabilidad.
Gentian, “el gran facilitador” (Orozco, 2006), también de las dietas, ¡cómo no!. Si nos desanimamos, frustramos o desalentamos antes los retrocesos en nuestros planes de cambio de hábitos alimenticios, que nos puede llevar a abandonar el intento.
Rock Water, si el exceso de rigidez con el que abordamos el tema se convierte en un impedimento más que en una ayuda.
Cherry Plum, si hay dificultad en focalizar la voluntad en nuestro objetivo y disminuir el miedo (y la tentación) “a caer” en hábitos alimenticios dañinos (en cantidad o calidad).
Crab Apple, para ayudarnos a ser más amables con nosotros mismos y más objetivos con nuestro físico. Cuando nos sentimos “que ese alimento en sí o ese exceso de alimento” nos está “ensuciando por dentro”. Cuando el deseo de vernos libres de “esos kilos de más que nos sobran” toma más importancia de la que tiene (desproporción entre lo objetivo y lo subjetivo de la situación).
White Chestnut, para romper el vínculo del pensamiento obsesivo, para dejar de pensar en la dieta, en la comida. Cuando la comida es una obsesión.
Chestnut Bud, para el hábito de caer una y otra vez en eso que no deseamos, para aprender de nuestra conexión emociones-comida y “pillarnos” en el momento en el que la comida sustituye el sostenimiento de la emoción. Para ayudarnos en tener conciencia de que “esa” emoción nos impulsa a la comida.
Centaury, cuando sentimos que la comida “nos puede”, para ayudarnos a romper con la dependencia.
Walnut, ayuda a romper con hábitos adquiridos y que queremos dejar atrás. Cuando las costumbres y reuniones familiares nos desvían de nuestro propósito.
Agrimony, no sólo por ser un gran ansiolítico del sistema Bach, sino para ayudarnos en la conciencia emocional y en sentir que podemos hacernos cargo de nuestras emociones. Aunque no aconsejo tomarla más de 4 veces por día, ya que una toma frecuente en determinadas personas que acusen Agrimony de forma arraigada en su carácter puede provocar un efecto contrario al inicio.
Y “cualquier otra del total de las 38” ya que nunca está demás recordar que éstas son sólo ideas, sugerencias… un “ejercicio de pensar floralmente sobre un tema”; y no una fórmula, sino posibilidades cuya lectura puede “hacernos caer en cuenta”.
Recuerden que también pueden usarse las Flores de Bach para cocinar, la cocción, según E. Grecco (2007), potencia su efecto, y sin duda, ¡puede ser todo un disfrute!.

Referencias bibliográficas• Grecco, E. (2007). Trauma, emoción y síntoma. Comentario en el contexto del curso impartido en Arké. Noviembre. Barcelona.
• Juan Bautista, L. (2007). Las dos series de flores, sus correspondencias y otras investigaciones. Indigo, Barcelona.
• Menéndez, I. (2006). Alimentación emocional. La relación entre nuestras emociones y los conflictos con la comida. Ed. Grijalbo.
• Orozco, R. (1996). Flores de Bach: Manual para Terapeutas Avanzados. Indigo. Barcelona.
• Orozco, R. (2003). Flores de Bach: Manual de Aplicaciones Locales. Indigo, Barcelona.
• Orozco, R. (2004). Abordaje de la ansiedad y la angustia desde la Terapia Floral de Bach. Ponencia presentada al III Congreso Nacional de
• Terapia Floral, Benalmádena, 27 noviembre.
• Orozco, R. (2006). Gentian: el gran facilitador. Revista Sedibac 42, pp: 12-13. Asociación Sedibac, Barcelona. 

miércoles, 1 de agosto de 2012

Sindrome de Burn Out por Barbara Espeche


Se trata de un síndrome clínico descripto en su inicio en 1974 por el psiquiatra Freudemberg, en una clínica para Adicciones en Nueva York. Donde observó que al año de trabajo continuado de voluntarios sufrían una progresiva falta de energía, que llegaba a síntomas de ansiedad, desmotivación y depresión.
Esto también se comenzó a estudiar en las profesiones y oficios de alto riesgo, en un principio se hizo un chequeo pormenorizado con los bomberos, ya que es un trabajo de riesgo y siempre se presenta inesperadamente y dramáticamente. De allí proviene su nombre Burn out o estar quemado. Luego y hasta la actualidad se tiene en cuenta para los agentes de la salud, médicos, tipos de especialidades como cirujanos, terapistas de guardias, también para ejecutivos y personal que trabajan en condiciones de mucha presión, controladores y pilotos aéreos.
Esta evaluación cada día se ha hecho mas abarcativa debido a las grandes presiones a la que la gente en general esta sometida, sobretodo en las grandes ciudades.
Una psicóloga social investigó la temática de este estrés como algo diferenciado a los otros. De este modo confeccionó un Test o prueba de evaluación para el síndrome de Burn out.
Este test lleva el nombre Maslach, siendo éste el apellido de su autora. Ella describió una serie causas que llevan a este estrés diferenciado según ciertas características encontradas.

Basándose en índices significativos de investigación entre las causas principales encontró los siguientes indicadores:
• La caída del valor social de las profesiones u oficios de riesgo.
• La sobrecarga laboral debida al excesivo número pacientes a cargo en la medicina.
• La sobrecarga laboral por presión o temor a perder el trabajo.
• La merma en las retribuciones y estímulos de los empleados.
• Tensión por miedo a juicios de mala praxis.
• Tensión por miedo a sentirse laboralmente incompetentes en cualquier trabajo.
• Tensión por verse sometidos al uso y obligado aprendizaje de nueva tecnología de sistemas.
• Cansancio y desgaste emocional, desvitalización psíquica y física.
• Despersonalización en relación con el entorno, colegas y familia.
• Actitudes de irritabilidad, competencia y desconfianza con los demás.
• Insatisfacción en sus profesiones y oficios.
• Pérdida del sentimiento de competencia e idoneidad profesional.
• Desmotivación, falta de autoestima laboral, deserción y abandono progresivo de tareas.
• Somatizaciones que van desde trastornos funcionales a lesiónales, según el grado de avance.
• Depresión, tendencia al suicidio.
• Problemas llamativos de alcoholismo, adicciones, insomnio, hipertensión arterial ( T.A.).
• Cefaleas, trastornos articulares y musculares, entre los más relevante.
• El continuo y sostenido contacto con el sufrimiento, dolor y muerte.
• Trastornos cardiocirculatorios, accidentes cerebro vasculares A.C.V.
El Síndrome de Burn out, es un tipo específico de estrés laboral; padecido por los profesionales de la salud, los educadores, ejecutivos, policías, empleados gubernamentales, etc., haciéndose cada vez mas amplia  la franja de trabajadores de todo el mundo que son susceptibles de entrar al alto nivel de estrés llamado Burn out.
El Síndrome de Burn out, se debe abordar de modo interdisciplinario, en la clínica médica, en lo psicológico y los tratamientos de índole natural tenemos una valiosa herramienta de abordaje con la Terapéutica Floral.
Dadas las características del Síndrome de Burn out, tenemos que tener en cuenta aquellos síntomas que son comunes y aquellos que son mas personalizados.
Estratégia Floral
Partimos de la base que el sentimiento de estar “QUEMADOS” nos da un índice de alto riesgo, para lo que tendremos en cuenta en primera instancia Esencias Florales de emergencia, del mismo modo que se aborda el estrés postraumático.
Considerando prescripciones de inicio con:
• Rescue Remedy
• Star of Bethlehem
• Cherry Plum
• Olive
• Waratah
• Macrocarpa
• Fringed Violet
En una segunda etapa la estrategia es apuntar a la falta de autoestima, depresión, desmotivación e insatisfacción:
• Larch
• Gorse
• Wild Rose
• Elm
• Five Corners
• Botón de Oro
En la tercer etapa según la evolución, se hará una reevaluación repitiendo el Test nuevamente, observando las modificaciones mas notables. A partir de allí se volverá a reformular con las Esencias adecuadas de lo que la persona ha podido superar y sino se continua con algunas de ellas, agregando de modo personalizado los conflictos mas sobresalientes del consultante y las descargas somáticas que presente.